¿Qué es?
La toxina botulínica es un tratamiento estético mínimamente invasivo utilizado para relajar temporalmente los músculos responsables de la formación de arrugas dinámicas. Su aplicación permite suavizar las líneas de expresión y prevenir la formación de nuevas arrugas, logrando un aspecto más fresco y rejuvenecido.
¿Cómo funciona?
La toxina actúa bloqueando de manera controlada la liberación de acetilcolina, el neurotransmisor que provoca la contracción muscular.
Al relajar estos músculos, la piel se alisa y las arrugas se atenúan visiblemente.
El efecto comienza a notarse entre 3 y 7 días después de la aplicación y alcanza su máximo resultado alrededor de las 2 semanas.
¿Qué zonas puede tratar?
La toxina botulínica se utiliza principalmente en el tercio superior del rostro, pero también puede aplicarse en otras áreas estéticas y terapéuticas.
Se recomienda para:
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Líneas de expresión en frente
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Entrecejo (líneas de preocupación)
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Patas de gallo
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Elevación de cejas
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Sonrisa gingival
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Arrugas peribucales (código de barras)
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Corrección de asimetrías faciales
Resultados con
El protocolo habitual consiste en 1 sesión, con resultados que duran entre 4 y 6 meses.
Se recomienda repetir el tratamiento de forma periódica para mantener los efectos y prevenir la aparición de nuevas arrugas.
Número de sesiones recomendadas:
Toxina Botulínica
Recomendaciones
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Posterior al tratamiento debe permanecer sentado o en posición vertical durante las siguientes 4 horas para evitar que el medicamento migre a otros músculos. Importante no acostarse.
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No tocarse ni masajear las áreas de punción el día en el que se realizó el tratamiento.
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No maquillarse durante las siguientes 12 horas.
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No realizar ejercicio físico intenso los siguientes 2 días posteriores al procedimiento.
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No debe asistir a piscina, turco o sauna los 3 días después del procedimiento.
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No usar gafas si se ha aplicado la toxina en nariz.
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Puede maquillarse al siguiente día y continuar con su rutina habitual de piel.
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La presencia de cefaleas (dolor de cabeza) puede ocurrir y está relacionada con la ansiedad, (Antes, durante y después del procedimiento). Este síntoma cede espontáneamente.
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Asistir a control 12 días después del tratamiento, máximo 15 días después para realizar algún retoque en caso de que sea necesario.
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Si una ceja se eleva demasiado no se angustie solicite una cita de control lo más pronto posible.
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Si observa alguna asimetría en las áreas tratadas que le llame mucho la atención solicite adelantar su cita de control.